En una preocupante escalada de violencia en la región, el Gobierno de Estados Unidos ha instado a las autoridades israelíes a proteger a todos los civiles de cualquier daño durante la operación militar que se está llevando a cabo en Cisjordania. Esta operación, que es la más extensa en años, ha generado gran inquietud en la comunidad internacional.

El Departamento de Estado estadounidense ha expresado su profunda preocupación por mantener la estabilidad en la zona y ha instado a Israel a tomar medidas para proteger a los civiles cisjordanos, al igual que se hace en Gaza. Sin embargo, han rechazado la idea de desplazamientos masivos de palestinos en Cisjordania, aunque reconocen que las evacuaciones locales pueden ser necesarias para proteger vidas durante operaciones antiterroristas sensibles.

El ministro de Exteriores israelí, Israel Katz, ha planteado la posibilidad de una evacuación temporal de residentes palestinos en Cisjordania para abordar la amenaza, similares a las realizadas en Gaza. Esta propuesta busca evitar el establecimiento de un nuevo frente terrorista iraní-Hamás-palestino, siguiendo el modelo de Gaza y Líbano, en la región.

Las Fuerzas de Defensa de Israel han dado inicio a una operación militar en el norte de Cisjordania, dejando once palestinos muertos y más de veinte heridos hasta el momento. Las incursiones por parte de las tropas israelíes se han incrementado desde octubre, causando preocupación en la población civil y en la comunidad internacional.

Los ataques y operaciones militares en Cisjordania y Jerusalén Este han dejado un alto número de víctimas palestinas en los últimos meses, con más de 660 muertos desde octubre. Las autoridades palestinas en la Franja de Gaza han contabilizado más de 40.500 muertos a causa de los ataques israelíes, lo que refleja la grave crisis humanitaria que se vive en la región.