La dirección nacional del PP ha justificado la entrada de Vox en Extremadura debido a que su voto es "imprescindible" para lograr la investidura, pero han dejado claro que no se han realizado "cesiones ideológicas" en este y otros acuerdos con la formación de Santiago Abascal. Según fuentes del PP, esto demuestra "una forma diferente de proceder entre el PP y el PSOE" en relación a los pactos.
El PP y Vox han alcanzado un acuerdo para gobernar en coalición en Extremadura, en el cual Vox asumirá la consejería de Gestión Forestal y Mundo Rural. El acuerdo será firmado por María Guardiola y el portavoz de Vox en la Asamblea de Extremadura, Ángel Pelayo, en el Parlamento extremeño.
Ante este pacto, fuentes del PP han afirmado que el partido está contento por poder garantizar un cambio de Gobierno en Extremadura y por lograr la Presidencia en uno de los bastiones tradicionales del PSOE, donde obtuvieron los mismos escaños que el candidato socialista Guillermo Fernández Vara.
Además, han destacado que el acuerdo de investidura en Extremadura incluye expresamente la violencia machista como un problema real que debe ser erradicado en la sociedad extremeña. Según el PP, esto demuestra que no darán ningún paso atrás en la defensa de los derechos de las mujeres.
El PP ofreció a Vox la presidencia de la Asamblea extremeña y un puesto adicional en la Mesa de la Cámara. Finalmente, Vox obtendrá una única consejería: la de Gestión Forestal y Mundo Rural.
El PP ha permitido la entrada de Vox en aquellos lugares donde su voto afirmativo era imprescindible para lograr la investidura. Además, han afirmado que defenderán su legitimidad para gobernar en solitario en aquellos lugares donde son la fuerza más votada y tienen más escaños que toda la izquierda junta.
El PP ha recordado que la próxima semana se llevará a cabo el debate de investidura en Murcia y no será fácil para Vox justificar el bloqueo a la toma de posesión del presidente del PP, Fernando López Miras, quien obtuvo casi el 43% de los votos, según el partido.
Finalmente, el PP ha enfatizado que estos acuerdos no implican cesiones ideológicas y confirman una forma diferente de proceder en comparación con el PSOE. Según el PP, el sanchismo ya habría obtenido todas las presidencias autonómicas que la aritmética permita, cediendo principios y valores a socios como Podemos a cambio de obtener el poder. El PP, en cambio, está protegiendo su ideología sin someter sus creencias a las exigencias de nadie.
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