MADRID, 15 Nov.
Un total de 24 personas con pasaporte español han recibido autorización para abandonar este miércoles la Franja de Gaza a través del paso de Rafá, en la frontera con Egipto, según han anunciado las autoridades del enclave palestino, controladas por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás).
Esto demuestra la difícil situación que se vive en Gaza, donde una gran cantidad de personas desean abandonar la región en busca de seguridad y una vida mejor. Sin embargo, la crisis humanitaria que enfrenta la población gazatí dificulta su movilidad y acceso a las fronteras internacionales.
Así, la Autoridad General para Cruces y Fronteras en la Franja de Gaza, dependiente del Ministerio del Interior gazatí, ha especificado que 24 ciudadanos españoles podrán salir de Gaza como parte de las cerca de 575 personas que han recibido autorización para cruzar el paso de Rafá durante la jornada de hoy.
Esperamos que estas personas puedan llegar a sus destinos de manera segura y encuentren la ayuda y apoyo que necesitan en su país de origen. Sin embargo, no podemos ignorar la realidad de que muchas personas en Gaza aún continúan atrapadas y sin posibilidad de escapar de la violencia y la opresión que se vive en la región.
A ellos se suman 103 rusos, cien suecos, 83 estadounidenses, 51 noruegos, 48 bielorrusos, 42 bosnios, 30 irlandeses, 27 kazajos, catorce bahreiníes, diez suizos, cinco austriacos, cinco moldavos y otras 34 personas cuya nacionalidad no ha sido especificada.
La diversidad de nacionalidades de las personas que han recibido autorización para abandonar Gaza refleja la preocupación internacional por la situación en la región. Es evidente que la comunidad internacional reconoce la urgencia de la situación y está dispuesta a tomar medidas para ayudar a quienes se encuentran atrapados en Gaza.
El organismo ha especificado que estas personas "deben estar presentes a las 7.00 horas (hora local) en el pasillo exterior del cruce", de cara a su salida de la Franja. El paso de Rafá abrió el 2 de noviembre por primera vez desde el 7 de octubre para permitir la evacuación de heridos y la salida de ciudadanos extranjeros. Previamente, había sido abierto en varias ocasiones, pero sólo para permitir la entrada de ayuda humanitaria a Gaza.
Es lamentable que Gaza haya llegado a esta situación, donde la población depende de la apertura de pasos fronterizos para recibir ayuda humanitaria básica. La situación en Gaza es desesperada y requiere una solución urgente para poner fin al sufrimiento de la población.
Los ataques ejecutados por Hamás en Israel dejaron cerca de 1.200 muertos y más de 240 secuestrados. Las autoridades de Gaza, controladas por el grupo islamista, han denunciado más de 11.300 muertos en la Franja, mientras que más de 180 palestinos han muerto a manos de las fuerzas israelíes o en ataques perpetrados por colonos en Cisjordania y Jerusalén Este.
Es importante recordar que las cifras de víctimas que se reportan son solo una parte de la tragedia que se vive en la región. Detrás de cada número hay historias humanas de dolor y sufrimiento. La violencia y el conflicto deben cesar para que las vidas perdidas no sean en vano y se pueda construir un futuro de paz y justicia para todos en la región.