La comunidad internacional está en alerta por el incremento de la violencia en Líbano, con el secretario general de la ONU, António Guterres, expresando su extrema preocupación y pidiendo un alto el fuego inmediato para evitar una guerra a gran escala.

En medio de una escalada de tensiones, Guterres ha solicitado el respeto por la soberanía y la integridad territorial de Líbano, particularmente después de una incursión terrestre de las Fuerzas de Defensa de Israel en respuesta a la amenaza de Hezbolá tras la muerte de su líder, Hasán Nasralá, en un bombardeo israelí en Beirut.

El secretario general de la ONU ha estado en contacto con diversas partes involucradas en el conflicto y ha reiterado su apoyo al primer ministro en funciones de Líbano, Nayib Mikati, asegurando que todo el sistema de Naciones Unidas está comprometido en ayudar al país en esta crisis.

Además, Guterres ha instado a la comunidad internacional a responder de manera urgente al llamamiento humanitario emitido este martes, que busca recaudar casi 426 millones de dólares para hacer frente a las necesidades de la población afectada por el conflicto, según un comunicado de la ONU.