En un giro notable dentro del sector automovilístico, Hyundai Motors y su subsidiaria Kia Corporation han ofrecido una proyección de ventas que sugiere un aumento del 2% en las matriculaciones para el año 2025, alcanzando un total de 7,39 millones de unidades. Esta noticia emerge a pesar de que ambas marcas han experimentado un descenso significativo en su volumen de negocio durante el último año, además de no cumplir con las metas que se habían propuesto.
Con un volumen de ventas combinado que suma 7,23 millones de vehículos, ambas empresas están poniendo su confianza en la fortaleza del mercado norteamericano. Esta estrategia busca contrarrestar la incertidumbre en Europa y en otros mercados asiáticos, donde la demanda ha mostrado patrones erráticos que complican su rendimiento.
A pesar de un panorama económico que se prevé complicado, caracterizado por tensiones comerciales en aumento y el impacto de la nueva administración de Donald Trump, Hyundai y Kia continúan avanzando con planes ambiciosos para expandir su infraestructura de producción en los próximos meses. Esto sugiere que, a pesar de los desafíos, mantienen una visión optimista a largo plazo.
En un movimiento estratégico, Hyundai ha comenzado a operar en su nueva planta ubicada en Georgia, Estados Unidos. Esta decisión busca asegurar un acceso a los subsidios ofrecidos por la administración de Biden, destinados a fomentar la producción de vehículos eléctricos, pintando un futuro más sostenible para la compañía.
Aunque aún no han aclarado detalladamente cómo planean aumentar su volumen de ventas en los próximos meses, la llegada de un nuevo consorcio automovilístico compuesto por las firmas japonesas Honda y Nissan representa una posible competencia. Este nuevo conglomerado podría desafiar la posición de Hyundai como el tercer fabricante de automóviles más grande del mundo, lo que ha despertado inquietudes en el mercado.
En el ámbito financiero, las acciones de Hyundai experimentaron un leve incremento del 0,71% en la Bolsa de Valores de Seúl, cerrando en 213,000 wones (alrededor de 140,71 euros por acción). Sin embargo, Kia enfrentó una ligera caída en el valor de sus acciones, que cedieron un 0,8%, estableciéndose en 100,700 wones (aproximadamente 66,52 euros por acción), lo que refleja la volatilidad del interés inversionista en el sector.
Newsletter
Entérate de las últimas noticias cómodamente desde tu mail.