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Macron reconoce su error al adelantar elecciones: "Generó más inestabilidad que calma".

Macron reconoce su error al adelantar elecciones:

En un discurso de fin de año marcado por la introspección y la autocrítica, el presidente francés Emmanuel Macron ha reconocido su error al convocar elecciones legislativas anticipadas, las cuales se llevaron a cabo entre junio y julio. Este reconocimiento llega en un momento en que la inestabilidad política ha sido una preocupación constante para los ciudadanos franceses, algo que Macron admitió ha generado más incertidumbre que serenidad.

El mandatario explicó que su intención al disolver la Asamblea Nacional fue dar voz a los ciudadanos y ofrecer claridad en un contexto donde la inacción parecía prevalecer. Sin embargo, con humildad y lucidez, Macron ha declarado: "Acepto toda mi responsabilidad", reconociendo que la decisión no ha tenido los resultados esperados y ha causado una mayor desestabilización en el país.

Este es un momento notable, ya que es la primera vez que Macron asume públicamente la responsabilidad por esta controvertida decisión. La presión ejercida por la creciente victoria de la Agrupación Nacional de Marine Le Pen en las elecciones europeas jugó un papel crucial en su decisión de adelantar los comicios, resultando en un parlamento fragmentado que dificultó la gobernabilidad.

Después de estas elecciones, se formó un gobierno bajo la dirección del conservador Michel Barnier, el cual tuvo una corta vida de solo tres meses debido a la incapacidad para aprobar presupuestos. Ante esta crisis, Macron tomó la decisión de nombrar a François Bayrou como nuevo primer ministro, buscando una solución que estabilizara la situación política del país.

En su discurso, Macron también instó a los franceses a permanecer "unidos, decididos y solidarios" de cara al año 2025, confiando en que esta unión permitirá alcanzar los objetivos previstos y celebrar los éxitos que se anticipan para 2024. Destacó la importancia de eventos como los Juegos Olímpicos de París y el blindaje constitucional del derecho al aborto, así como el valor de ciudadanos como Gisèle Pélicot, quien se ha atrevido a denunciar a su esposo, mostrando que la valentía también forma parte del espíritu francés.

Asimismo, el presidente abrió la discusión sobre la posibilidad de referéndums, sugiriendo que en 2025 los ciudadanos tendrán la oportunidad de decidir sobre "cuestiones determinantes". Macron enfatizó la necesidad imperiosa de actuar y decidir en áreas cruciales como la economía, la seguridad y la educación de las futuras generaciones, subrayando que el destino de los próximos años depende de las decisiones que se tomen hoy.

Dirigiéndose a sus vecinos europeos, Macron hizo un llamado a dejar atrás la ingenuidad en temas de comercio y agricultura, instando a un "despertar" ante lo que consideró ser "leyes dictadas por otros". Este mensaje refuerza la necesidad de un enfoque más autónomo y decidido en las políticas europeas.

Finalmente, concluyó su alocución manifestando la urgencia de un despertar colectivo, no solo en el ámbito político, sino también en lo científico, intelectual y ecológico. Asegurando que es necesario tomar decisiones rápidos y firmes como europeos, Macron deseó un feliz 2025 a todos los franceses, dejando claro su compromiso por un futuro más próspero y estable.