En la mañana de este domingo, se abrieron los primeros centros de votación en Moldavia, dando inicio a una jornada crucial en la que los ciudadanos serán los protagonistas. Con casi 2.000 centros habilitados, los moldavos elegirán al próximo presidente de la República y responderán al referéndum constitucional sobre una posible futura adhesión a la Unión Europea.
Los colegios electorales, distribuidos en un total de 1.988 ubicaciones en todo el país, permanecerán abiertos hasta las 21.00 horas. En caso de que ninguno de los once candidatos logre superar el 50% de los votos, se llevará a cabo una segunda vuelta el 3 de noviembre.
Para garantizar la transparencia del proceso, se ha puesto en marcha un centro de atención telefónica que estará operativo durante la jornada de votación y se extenderá hasta el 22 de octubre. En caso de una segunda ronda, su funcionamiento se prolongará hasta el 5 de noviembre.
Según informa la agencia de noticias estatal Moldpress, más de 2.000 observadores estarán presentes durante las elecciones. La mayoría de ellos, 1.277, son nacionales y representan a diversas asociaciones moldavas. Los 784 observadores restantes son internacionales, provenientes de 24 misiones diplomáticas, 14 autoridades electorales extranjeras, dos asociaciones internacionales y la misión de observación electoral de la OSCE. Todos han sido acreditados por la Comisión Electoral Central (CEC) para garantizar la legitimidad y transparencia del proceso electoral.
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