La representante especial del secretario general de la ONU para la Infancia y Conflictos Armados, Virginia Gamba, ha alertado sobre la crítica situación de los niños en la Franja de Gaza, en Cisjordania, en Israel y en Líbano, especialmente después de los intensos enfrentamientos entre Hezbolá y el Ejército israelí.

Se han cometido atrocidades contra niños, dejándolos mutilados o asesinados, y muchos han sido desplazados. Las escuelas y centros médicos están cerrados, dañados o destruidos, poniendo en peligro constante la seguridad y bienestar de los niños debido al conflicto, según Gamba.

La representante expresó su preocupación por el incremento de víctimas civiles, incluidos niños y trabajadores humanitarios, instando a todas las partes a implementar un alto el fuego de forma inmediata.

Gamba declaró que es crucial poner fin a la violencia en beneficio de los niños, destacando que los intereses políticos y militares no deben prevalecer sobre la vida, la seguridad y el futuro de los niños en la región. Instó a acabar con la hostilidades y fomentar el diálogo como las mejores soluciones para proteger a los niños de los conflictos armados.

Enfatizó la importancia de priorizar la protección de los niños durante un momento en el que las partes no logran encontrar un acuerdo pacífico, donde objetivos militares eclipsan las preocupaciones humanitarias y la guerra desplaza comunidades enteras.

Los enfrentamientos en la región comenzaron después de que Hamás y otras facciones palestinas lanzaron una serie de ataques contra Israel el 7 de octubre, lo que resultó en un alto número de muertos y rehenes. El Ejército israelí respondió con una campaña militar en Gaza que ha dejado miles de víctimas. Además, se abrió un nuevo frente en la frontera entre Israel y Líbano, con combates constantes desde hace meses. Milicias de Yemen e Irak también han participado en los ataques a Israel, generando una escalada de violencia.