En un movimiento que marcará el rumbo político de Portugal, el presidente Marcelo Rebelo de Sousa ha anunciado este jueves que el país se dirigirá a las urnas el próximo 18 de enero para elegir un nuevo titular de la presidencia. Dada su situación, Rebelo de Sousa no buscará la reelección, abriendo un espacio para que los principales partidos políticos se enfrenten en un nuevo desafío democrático.

El anuncio se formalizó mediante un decreto presidencial que fue publicado en el Diario de la República, cumpliendo así con las normativas establecidas en la Constitución y la legislación electoral. En este breve comunicado emitido desde su oficina, se dejaba en claro que la cita electoral está fijada para el próximo domingo 18 de enero de 2026.

Las reglas establecidas en la ley electoral determinan que las elecciones presidenciales deben llevarse a cabo dentro de un plazo de 60 días antes de que finalice el mandato del presidente saliente. Esta regulación obligaba a la celebración de los comicios entre el 8 de enero y el 9 de marzo. Para evitar que la segunda vuelta coincidiera con las festividades del Carnaval, Rebelo de Sousa decidió fijar la fecha para el 18 de enero.

El actual periodo de presentación de candidaturas sigue activo y hay varios nombres destacados en el horizonte político para ocupar la presidencia. Entre los contendientes se encuentran Luís Marques Mendes, representante del Partido Social Demócrata (PSD), el socialista António José Seguro, y el líder del partido ultraderechista Chega, André Ventura, quien ha causado revuelo en la escena nacional.