Sánchez deja abucheos en el Congreso durante su investidura mientras la cifra de manifestantes cae a 400
MADRID, 16 Nov. - Según ha informado la Delegación del Gobierno en Madrid, el número de manifestantes concentrados en los alrededores del Congreso de los Diputados ha bajado a 400 en la segunda sesión plenaria en la que Pedro Sánchez ha sido elegido presidente del Gobierno.
En la llegada y salida de los diputados del PSOE y de las fuerzas políticas que han respaldado la investidura de Sánchez, se registraron abucheos y lanzamiento de huevos hacia un grupo de socialistas.
De acuerdo con la Delegación del Gobierno, la protesta ha reunido a unos 200 manifestantes concentrados en la Plaza de Neptuno y otros 200 en la calle Cedaceros, siempre detrás del cordón policial y las vallas que protegen el hemiciclo.
Esta cifra de manifestantes ha sido ligeramente inferior a la jornada anterior, cuando más de 600 personas protestaron en la Cámara Baja en contra de los pactos del PSOE con los partidos independentistas y por el proyecto de ley de amnistía negociado con Junts y ERC.
Un grupo de diputados del PSOE que se encontraba desayunando en un bar cercano a la Cámara Baja fue increpado e insultado por un grupo de personas que les reconocieron. Al salir, incluso les lanzaron huevos, por lo que tuvieron que ser escoltados por agentes de la Policía Nacional de vuelta al Congreso de los Diputados.
La sesión de investidura de Sánchez inició ayer con un fuerte despliegue policial, con aproximadamente 1.600 agentes en los alrededores del Congreso, en medio de un clima de protestas y tensión social.
Después de la primera sesión del Pleno, se registraron cargas policiales en una nueva manifestación convocada cerca de la sede del PSOE en la calle Ferraz. Inicialmente, el líder de Vox, Santiago Abascal, la apoyó antes de abandonar el Congreso sin esperar a la réplica de Pedro Sánchez.
Durante estos dos días de protestas, los manifestantes han llevado banderas de España y han gritado consignas contra el Gobierno y los acuerdos de los socialistas con los independentistas de ERC y Junts. Especialmente se han focalizado en Pedro Sánchez y Carles Puigdemont debido a la amnistía propuesta para los encausados por el 'procés' a lo largo de los últimos diez años.