Fecha: 3 de noviembre, Madrid.

El paso devastador del huracán de categoría 5 ‘Melissa’ ha dejado casi seis millones de personas afectadas en el Caribe, según informes de la ONU, que ya ha movilizado sus recursos y agencias para hacer frente a la emergencia humanitaria que se avecina.

Desde Kingston, la capital de Jamaica, Alexis Masciarelli, representante del Programa Mundial de Alimentos (PMA), ha señalado que "nuestra misión prioritaria es llegar a las comunidades más remotas". Esta declaración resalta el compromiso del PMA por socorrer a quienes se encuentran en las zonas más vulnerables y de difícil acceso.

Con el objetivo de mitigar el impacto del huracán, el PMA ha comenzado a implementar planes de emergencia para la distribución de alimentos, garantizando que las familias más afectadas reciban la asistencia necesaria. Se prevé que más suministros lleguen en los próximos días para satisfacer la creciente demanda.

Una de las áreas que ha soportado el embate más severo es St. Elizabeth, conocida como el granero de Jamaica. La destrucción de viviendas y cultivos ha sido alarmante, y muchas comunidades aún carecen de comunicaciones y electricidad, evidenciando la magnitud de la crisis.

Hasta ahora, se han repartido kits alimentarios a 1.500 familias, cada uno compuesto de arroz, lentejas, pescado, carne enlatada y aceite vegetal. Además, se anticipa la llegada de otros 2.000 kits desde Barbados por vía aérea en las próximas horas. El ambicioso objetivo del PMA es proporcionar asistencia alimentaria a 200.000 personas en Jamaica, para abordar las necesidades más urgentes.

En Cuba, la situación no es menos crítica, con inundaciones severas, cortes de electricidad y daños significativos en varias áreas. Hasta el momento, la ayuda alimentaria ha llegado a 181.000 personas que se encuentran en refugios, con el objetivo de alcanzar a 900.000 afectados en total.

Haití, que lamentablemente ha reportado el mayor número de fallecimientos, ha visto cómo el huracán ha devastado la infraestructura en el sur del país. Hasta la fecha, el PMA ha proporcionado apoyo a 12.700 personas, con planes de llegar a 190.000 en las próximas dos semanas, distribuyendo kits que cubran sus necesidades alimentarias por ese período. Luego, se prevé ofrecer asistencia económica mensual para facilitar el proceso de recuperación.

Masciarelli ha expresado su preocupación, alertando que aún hay un gran número de personas a las que no se ha podido llegar. Subrayó la importancia de que la respuesta a esta crisis humanitaria sea un compromiso prolongado, describiéndolo como "un maratón muy largo hacia la recuperación".

Además, el PMA lanzó recientemente un llamamiento urgente por un total de 74 millones de dólares (aproximadamente 64,2 millones de euros) para brindar ayuda a 1,1 millones de personas en la región caribeña, una cifra que podría no ser suficiente dada la magnitud de la tragedia.