La reciente jornada bursátil en Madrid ha visto caer la cotización de Telefónica alrededor de un 2%, estableciendo su valor en 4,356 euros. Este descenso se produce en medio de expectativas crecientes sobre el nuevo plan estratégico que la empresa presentará el próximo martes. Tras las declaraciones del presidente de la compañía, Marc Murtra, en la última junta de accionistas, muchos invierten ya anticipan una posible reducción del dividendo, parte de una iniciativa destinada a fortalecer su situación financiera y asegurar una "disciplina financiera de hierro".

La caída en el valor de las acciones ha sido influenciada por informaciones divulgadas por la agencia 'Bloomberg', que se suman a reportes anteriores del diario 'VozPópuli', donde se menciona la posibilidad de que Telefónica esté considerando ajustar el dividendo que ofrece a sus accionistas.

A pesar de esto, en julio la empresa había confirmado un dividendo de 0,3 euros por acción relacionado con los resultados actuales, que se distribuirá en dos pagos de 0,15 euros, uno programado para diciembre y otro para junio de 2026.

La acción de Telefónica, que cerró el jueves en 4,46 euros, ha experimentado un aumento cercano al 13,5% en lo que va del año, mientras que durante octubre ha oscilado entre 4,31 y 4,62 euros. Este contexto resalta la incertidumbre de los inversores ante las inminentes decisiones estratégicas de la compañía.

El 4 de noviembre, Telefónica mostrará no solo su nuevo plan estratégico, sino que también hará públicos los resultados financieros del tercer trimestre, lo cual es esperado con gran interés por los analistas del sector.

En otro frente, la compañía acaba de concluir la venta de su filial en Ecuador por 380 millones de dólares a Millicom, un movimiento que evidencia su estrategia de disminuir la exposición en los mercados de Hispanoamérica. Telefónica ya había vendido previamente sus filiales en países como Argentina, Perú, Uruguay y Colombia, y se encuentra en negociaciones respecto a su negocio en Chile.

Además, los resultados de su filial en Brasil, que es su mercado más importante fuera de Europa, revelan que ha registrado un beneficio neto cercano a 690 millones de euros entre enero y septiembre, con un crecimiento de casi el 7% en ingresos, alcanzando los 7.063 millones de euros.