Toyota, el mayor fabricante de automóviles del mundo, ha decidido aumentar su programa de recompra de acciones hasta alcanzar los 1,2 billones de yenes (7.400 millones de euros) debido a su preocupación por los niveles de cotización en la Bolsa de Valores de Tokio.

Esta decisión ha sido informada a través de un comunicado en el que se detalla que se agregarán 200.000 millones de yenes (1.237 millones de euros) al plan de recompra inicialmente anunciado en mayo y válido hasta abril de 2025, con el objetivo de reducir en un 4% el capital flotante de la compañía.

En los últimos seis meses, las acciones de Toyota han sufrido una caída del 30%, cotizando a 2.644 yenes (unos 16,37 euros por acción), lo que contrasta con el avance del Nikkei 225 que ha registrado un crecimiento del 13% en el mismo periodo.

En el último trimestre, Toyota logró aumentar su beneficio neto en un 1,7%, llegando a los 1,33 billones de yenes (más de 8.235 millones de euros), lo que le permite mantener sus previsiones de ganancias para el ejercicio en 4,3 billones de yenes (26.623 millones de euros).

En julio, la compañía ya había anunciado una recompra de acciones adicional por valor de 806.800 millones de yenes (casi 4.800 millones de euros) dirigida a la adquisición de títulos ofrecidos por grandes aseguradoras y entidades bancarias en Japón, en el marco de una estrategia impulsada por el Gobierno para que las empresas se deshagan de participaciones estratégicas cruzadas.

Para Toyota, esta medida busca aumentar la rentabilidad de los accionistas y liberar capital para invertir en su transformación hacia convertirse en un fabricante de vehículos neutro en carbono.