El expresidente Donald Trump ha confirmado que finalmente se llegó a un acuerdo con la vicepresidenta Kamala Harris para llevar a cabo el debate del 10 de septiembre en la cadena ABC. Esta decisión se tomó luego de diferencias entre los equipos de ambos candidatos en cuanto al manejo de los micrófonos durante el cara a cara.

Por un lado, el equipo de Trump propuso repetir el sistema utilizado en junio, donde los micrófonos se abrían solo para los oradores, mientras que la campaña de Harris abogaba por mantenerlos siempre abiertos, lo que podría resultar en más interrupciones entre los candidatos.

Trump anunció en su red Truth Social que se alcanzó un acuerdo con "los demócratas radicales de izquierda", y se aplicarán las mismas reglas que en el debate de junio, el cual considera que funcionó muy bien para todos, con la excepción de Joe Biden.

Además, el magnate republicano recordó que sigue dispuesto a participar en otro debate el 4 de septiembre, organizado por Fox News, y en una tercera cita propuesta por NBC.