Ucrania solicita mayor acción contra la elusión de sanciones de Rusia en armas con componentes europeos.

En una reunión celebrada este martes en Bruselas, Ucrania ha instado a la Unión Europea a redoblar sus esfuerzos para combatir la elusión de sanciones europeas a Rusia. Esto surge después de que se encontraran pruebas de que componentes de armas y equipos militares utilizados por las fuerzas armadas rusas son fabricados por empresas occidentales, incluidas varias de la UE.

El asesor del gabinete del presidente de Ucrania, Vladyslav Vlasiuk, compartió imágenes de componentes fabricados en la UE que se hallaron en armamento ruso durante el encuentro con Europa Press y otros medios internacionales en la capital belga.

Las pruebas presentadas por el Gobierno ucraniano forman parte de una exposición inaugurada este martes sobre componentes y tecnología utilizados en armas y equipos militares rusos desplegados en la guerra contra Ucrania, organizada por la Misión de Ucrania ante la UE.

Vlasiuk mencionó compañías europeas como la italiana Finder, que fabrica algunos de sus componentes en España; la alemana Infineon Technologies; la neerlandesa NXP Semiconductor o la suiza STMicroelectronics, y señaló que la mayoría de los componentes provienen de empresas estadounidenses.

"La mayoría de las tecnologías punteras que encontramos son occidentales, especialmente de Estados Unidos, pero nuestro principal problema sigue siendo China, de donde proviene alrededor del 60% de cada componente", destacó el asesor del presidente ucraniano, Volodimir Zelenski.

Vlasiuk expresó su confianza en que el gobierno chino se dé cuenta de que suministrar tecnología a Rusia no es lo ideal. Sin embargo, mientras eso sucede, pidió a las empresas e instituciones occidentales que impongan limitaciones en la calidad, cantidad y precio de los componentes tecnológicos.

El experto en sanciones señaló que aunque la UE ha realizado grandes esfuerzos diplomáticos, a veces la diplomacia no es suficiente y se necesitan medidas más contundentes para evitar que Rusia reciba tecnología china de forma fraudulenta.

Vlasiuk también resaltó la "creatividad" de Rusia para evadir las sanciones europeas a través de terceros países como Taiwán o Irán, y apuntó que los fabricantes occidentales deberían hacer más para impedirlo.

A pesar de que muchos de los componentes occidentales no se fabricaron específicamente para uso militar, Vlasiuk destacó que se trata de tecnología avanzada y no de componentes comunes. Por ello, insistió en la necesidad de un mayor esfuerzo por parte de instituciones, gobiernos y fabricantes para garantizar la implementación efectiva de las sanciones.

"Es fundamental que todos trabajemos juntos para evitar que regímenes terroristas tengan acceso a la tecnología más avanzada de Occidente", concluyó Vlasiuk.