El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, ha expresado su preocupación por la lentitud de la contraofensiva ucraniana debido a las defensas rusas y ha manifestado que hubiera preferido que las armas de occidente hubieran llegado más rápido para agilizar las operaciones.

En una entrevista con CNN, Zelenski enfatizó que hay áreas en las que el Ejército ucraniano no puede iniciar un ataque debido a la falta de armamento adecuado. Agradeció el apoyo de Estados Unidos y los aliados europeos, pero expresó su deseo de haber iniciado la contraofensiva antes para evitar que más territorio fuera minado por el enemigo.

Zelenski subrayó la importancia del tiempo en cualquier ataque y explicó que empezar más tarde dificulta aún más la situación. Destacó que enviar a su gente a luchar contra las armas de largo alcance de Rusia sería inhumano.

El presidente ucraniano reiteró su apoyo a la entrega de aviones de combate F-16, ya que proporcionarían cobertura aérea necesaria para avanzar en el campo de batalla. Insistió en que no se trata de tener ventaja sobre Rusia, sino de estar igualados.

En otro tema, Zelenski afirmó que "la mitad de Rusia" apoyó la breve rebelión liderada por Yevgeni Prigozhin del Grupo Wagner el 24 de junio. Señaló que algunas regiones rusas estaban indecisas sobre a quién apoyar, lo cual muestra la división en la sociedad rusa.

Además, Zelenski mencionó que el presidente ruso, Vladimir Putin, ha estado fuera de los focos públicos desde la rebelión. Aunque no pudo confirmar su paradero exacto, destacó la poca visibilidad de Putin en la calle y sugirió que está tratando de consolidar su sociedad.

Por último, se informó que Prigozhin lideró una rebelión el 24 de junio que llegó a avanzar hacia Moscú, pero finalmente se alcanzó un acuerdo para su repliegue y posible integración en el Ejército. Prigozhin se encuentra actualmente en Bielorrusia.