En un reciente intercambio en el Congreso de los Diputados, el ministro de Presidencia y Justicia, Félix Bolaños, lanzó un contundente mensaje al Partido Popular (PP), advirtiéndoles sobre la necesidad de rectificar ante las acusaciones infundadas que emanan de organizaciones extremistas y que han manchado la reputación del Gobierno. Bolaños subrayó que, en el futuro, el PP podría verse en la obligación de ofrecer disculpas a quienes han sido injustamente perjudicados por estos rumores. "Se están revolcando en los bulos", afirmó, aludiendo a la desinformación que rodea a los casos judiciales actuales.

La intervención de Bolaños se produjo durante la sesión de control al Gobierno, donde varios representantes del PP interrogaron sobre las presuntas implicaciones de familiares del presidente Pedro Sánchez en casos de corrupción, así como sobre la investigación que afecta al empresario Víctor de Aldama. Al respondeder a estas preguntas, el ministro no se contuvo y advirtió: "Usted acabará pidiendo perdón a las personas a las que está difamando. Permita que los procesos judiciales sigan su curso y verá que muchos de estos casos no llevarán a nada".

La diputada Ester Muñoz, por su parte, reprochó a Bolaños las acusaciones de que el Poder Judicial estaría acosando al Gobierno. Cuestionó si el PP poseía pruebas concretas de jueces que supuestamente filtran información, y añadió: "¿O es que ustedes difaman por inercia?", insinuando una falta de fundamento en los señalamientos realizados por el Gobierno.

En este momento, Bolaños elevó el tono de su discurso, afirmando de manera enérgica que "existe una campaña de persecución por parte de organizaciones ultras contra políticos progresistas y sus familias". Su declaración fue contundente y clara: "Afirmo categóricamente que las organizaciones ultraderechistas que ustedes respaldan están degradando la figura de la acusación popular. Su objetivo no es perseguir delitos, sino atacar a personas, específicamente a políticos progresistas honrados y a sus seres queridos".

Finalmente, el ministro concluyó su intervención subrayando que la verdadera intención de estas organizaciones no es esclarecer la verdad, sino propagar mentiras, enfatizando que el PP se beneficia de esta desinformación y de los bulos que circulan en la esfera pública. Con esto, Bolaños dejó claro que la lucha contra la desinformación y la difamación debe ser una prioridad para la política española en tiempos de creciente polarización.