Con miras al Eurobasket 2025, que se celebrará en Letonia, Chipre, Finlandia y Polonia entre el 27 de agosto y el 14 de septiembre, Darío Brizuela, escolta de la selección española de baloncesto, ha dejado claro que el equipo es consciente del legado que representa su camiseta. En una reciente rueda de prensa, el jugador destacó el orgullo que siente al asumir la presión que conlleva competir en un torneo de tal envergadura.

Brizuela, tras un intenso entrenamiento en el pabellón del Triángulo de Oro en Madrid, enfatizó que el equipo no se define por etiquetas externas, sino que sabe lo que representa ser parte de la selección española. “Entendemos el peso de esta camiseta y estamos orgullosos de enfrentar la presión de cada competición”, afirmó con determinación.

En cuanto al ambiente del equipo, el escolta donostiarra compartió que la plantilla se siente en buen estado y con muchas ganas de seguir trabajando. Aseguró que hay tiempo para integrar a los jóvenes talentos al sistema del equipo, lo cual es clave para el futuro del baloncesto nacional.

Brizuela también comentó sobre su relación con el seleccionador Sergio Scariolo, con quien ha trabajado desde 2019. Reconoció que ya tiene una idea de lo que el entrenador espera de él, aunque mencionó que los entrenamientos recientes han sido una oportunidad para observar las prioridades del técnico italiano. “Conozco mis capacidades y lo que a él le gusta que haga”, añadió el jugador.

El escolta se refirió a la responsabilidad de llenar el vacío dejado por grandes referentes como Rudy Fernández y Sergio Llull. Sin embargo, aclaró que su enfoque no es reemplazar a estas leyendas, sino emular la esencia que ellos aportaron a la selección con su estilo y compromiso.

Hablando sobre el liderazgo actual, Brizuela destacó la labor de los hermanos Hernangómez, Willy y Juancho, quienes han tomado la capitanía del equipo. Para el jugador del Barcelona, su desempeño ha sido notable y un buen indicio del futuro del combinado nacional.

El escolta valoró además las sinergias que se generan en la selección, al compartir cancha con hasta diez de sus compañeros actuales, resaltando la importancia de tener una cultura deportiva similar. “Esto es una plantilla completamente diferente y es un plus poder entendernos tan bien dentro de la cancha”, detalló.

Asimismo, Brizuela destacó la importancia de la guía de Sergio Scariolo, señalando que su enfoque es esencial para desarrollar un juego rápido y competitivo. En cuanto a los objetivos del equipo, el jugador enfatizó la importancia de mejorar de manera constante, sin prisas ni presiones externas, recordando que aún queda tiempo para prepararse para el torneo.

Finalmente, respecto a la posibilidad de ocupar el papel de base debido a la baja de Lorenzo Brown, Brizuela comentó que aunque no es su posición más habitual, se siente más preparado que en años anteriores. “Estoy dispuesto a adaptarme, pero eso depende de las decisiones del cuerpo técnico”, concluyó, dejando claro su compromiso con el equipo y su disposición para colaborar en lo que sea necesario.