El pasado domingo, el Real Madrid logró una victoria significativa al derrotar al Deportivo Alavés por 1-0, y así lo destacó su segundo entrenador, Davide Ancelotti. Tras el encuentro, Ancelotti manifestó que este triunfo otorga una "confianza vital" al equipo en un momento crucial de la temporada.

“Este resultado era fundamental para nosotros, y aunque sabíamos que enfrentarnos al Alavés no sería sencillo, lo que ocurrió en el transcurso del partido complicó aún más las cosas. Sin embargo, el hecho de haber salido victoriosos nos brinda una base sólida para enfrentar el próximo desafío el miércoles”, declaró Ancelotti en la rueda de prensa posterior al partido, celebrado en Mendizorrotza.

Durante su intervención, el técnico abordó la controvertida expulsión de Kylian Mbappé, un jugador que, según él, no es propenso a la violencia. “Es innegable que cometió un error, y él mismo ha reconocido su falta. La entrada que llevó a su tarjeta roja fue clara y debe asumir la responsabilidad. Es posible que las muchas faltas que ha recibido previamente provocaran esa reacción, aunque no fue la forma correcta de responder”, apuntó Davide.

El futuro inmediato del Real Madrid también estuvo en la conversación, ya que se le preguntó sobre las posibilidades de superar al Arsenal en la Champions y al Barcelona en la Liga. “Sabemos que ambas tareas son complejas, pero tenemos la confianza y la calidad para lograrlo. Debemos ganarnos cada triunfo, no es suficiente con nuestros talentos individuales; hay que alinearse correctamente en el campo”, explicó Ancelotti con determinación.

El regreso de Dani Ceballos al equipo también fue un tema importante. Ancelotti confirmó que el jugador ha estado entrenando bien y está listo para aportar en el próximo partido. “Su entrada en el juego fue estratégica para dar un poco más de control a un partido que estaba algo caótico. Está preparado para lo que se viene”, dijo, refiriéndose a su capacidad para influir en el desenvolvimiento del equipo.

Finalmente, el entrenador expresó su preocupación por el clima de violencia y tensiones que se vive en el fútbol. “Es lamentable ver lo que está ocurriendo en la sociedad. Como equipo, nuestra tarea es competir, pero no somos los encargados de implementar cambios ante situaciones así. Todos deseamos que no se repitan estos incidentes. Dentro del terreno de juego, la comunicación entre árbitros y jugadores es clave”, concluyó, haciendo hincapié en la necesidad de mejorar la relación entre todos los actores del deporte.