El Partido Popular ha recibido duras críticas por parte de la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, quien reprocha su voto en contra de los objetivos de estabilidad en el Congreso. Montero ha calificado la actitud del PP como una estrategia "de acoso y derribo" contra el Gobierno de Pedro Sánchez, destacando su falta de compromiso con la mayoría social del país.

En declaraciones a los medios en la Cámara Baja, Montero ha mostrado su sorpresa frente al voto en contra de Junts, uno de sus socios de investidura, en relación a los objetivos de estabilidad. A pesar de estos obstáculos, la ministra ha asegurado que el Gobierno continuará trabajando y presentando iniciativas en el Parlamento.

La votación en contra de los objetivos de estabilidad y de la reforma de la Ley de Extranjería ha sido un revés para el Gobierno, especialmente con el voto negativo de Junts. Montero ha destacado la necesidad de seguir dialogando y ha confirmado que volverán a presentar la senda de estabilidad.

Además de criticar al PP por su actitud, Montero ha subrayado que los objetivos de estabilidad hubieran proporcionado importantes recursos para comunidades autónomas y ayuntamientos, muchos de los cuales están gobernados por el Partido Popular. Ha recriminado al PP por perjudicar a sus propios gobiernos al rechazar una medida que les permitiría un mayor margen de gasto y ha señalado que la única motivación del PP es intentar derribar al Gobierno.

En resumen, la votación en el Congreso ha revelado las tensiones políticas existentes, con acusaciones de sabotaje por parte del Partido Popular y la sorpresa por parte del Gobierno respecto al voto de Junts. La batalla por los objetivos de estabilidad y otras medidas continúa en un clima de confrontación política constante.