El pasado 15 de abril en Madrid, el Consejo de Ministros, liderado por la portavoz del Gobierno y ministra de Educación, Formación Profesional y Deportes, Pilar Alegría, decidió honrar la memoria del reconocido autor Mario Vargas Llosa. Este galardón, la Gran Cruz de la Orden Civil de Alfonso X el Sabio, se otorga de manera póstuma, tras el fallecimiento del escritor a la edad de 89 años en su hogar en Lima.

Durante una conferencia de prensa que siguió a la reunión del Consejo, Alegría destacó la magnitud del legado literario dejado por Vargas Llosa, mencionando que sería difícil enumerar todas sus obras más relevantes en un breve encuentro. Sin embargo, confirmó con orgullo que el homenaje a su trayectoria se materializa con la entrega de esta distinguida condecoración.

Como parte de su intervención, la ministra extendió las condolencias del Gobierno de España hacia los seres queridos de Vargas Llosa y hacia la vasta comunidad de lectores que lo siguieron a lo largo de su carrera, subrayando que su impacto se siente por millones de personas.

Vargas Llosa, quien acumuló una impresionante colección de premios en su carrera literaria que incluye el Premio Cervantes, el anterior Príncipe de Asturias y el prestigioso Premio Nobel en 2010, ahora se suma a un selecto grupo de personalidades que han recibido la Gran Cruz de Alfonso X el Sabio. Entre ellos se encuentran figuras emblemáticas como Joan Manuel Serrat, Ricky Rubio, Jorge Edwards, María Dolores Pradera, Concha Velasco y Carlos Saura, entre otros.

La Orden Civil Alfonso X el Sabio fue establecida en 1939, como continuación de la antigua Orden Civil de Alfonso XII. Su objetivo es reconocer a individuos y organizaciones que han destacado en los campos de la educación, la ciencia, la cultura y la investigación, ya sea a nivel nacional o internacional. En este contexto, el rey desempeña el papel de Gran Maestre de la Orden, mientras que el ministro o ministra de Educación actúa como Gran Canciller.