El Partido Popular (PP) expresa su preocupación ante la posibilidad de que el PSOE aproveche una semana clave para realizar votaciones cruciales, coincidiendo con la cumbre del Partido Popular Europeo (PPE) que se llevará a cabo en Valencia a finales de abril. Esta situación se ve complicada por la ausencia de su líder, Alberto Núñez Feijóo, y varios miembros del grupo parlamentario que estarán presentes en el evento internacional.

La presidenta del Congreso, Francina Armengol, ha rechazado la solicitud del PP para trasladar el Pleno de la Cámara Baja a otra fecha, lo que ha generado el descontento entre los dirigentes populares. Esta semana de sesiones representa una oportunidad para el PSOE, que podría llevar a cabo decisiones legislativas en ausencia de una parte importante de sus oponentes.

El portavoz del Grupo Popular, Miguel Tellado, había solicitado previamente a la Junta de Portavoces que se reconsiderara la fecha del Pleno. Según sus declaraciones, la cumbre del PPE estaba programada antes del inicio del actual periodo de sesiones, lo que evidenciaría una falta de consideración hacia los compromisos de los miembros del PP.

Desde el PP se subraya la importancia de esta cumbre, ya que se prevé la participación de hasta 14 primeros ministros del PPE, incluyendo a figuras destacadas como la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y la presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola. Aparte, se espera la llegada de líderes como el alemán Friedrich Merz y el polaco Donald Tusk, lo que pone de relieve la relevancia del encuentro para la política europea y española.

Fuentes cercanas al PP han señalado que el rechazo de Armengol a modificar la fecha del Pleno podría permitir que el PSOE avance con decisiones importantes a las que se oponen, como la propuesta de ley que busca delegar competencias en materia de inmigración en Cataluña, un tema que ya ha generado rechazo en otros partidos, como Podemos.

La dirección del PP teme que esta estrategia pueda deslegitimar el proceso legislativo y lesione la representación de su partido, puesto que muchos de sus diputados estarán ocupados en Valencia, donde se llevará a cabo una cena con altos mandos del PPE y otras actividades relacionadas con la cumbre, impidiéndoles participar en el debate del Congreso.