En una medida sin precedentes, el Grupo Parlamentario Socialista en el Congreso ha presentado una proposición no de ley para reducir el límite de alcohol permitido a los conductores en 0,2 g/l en sangre y 0,1 mg/l en aire espirado, tanto para vehículos motorizados como no motorizados.

Esta iniciativa, considerada como urgente para evitar más tragedias en las carreteras, ha recibido el respaldo del Ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, quien asegura que la sociedad española está lista para este cambio tan necesario.

El diputado Manuel Arribas, experto en Seguridad Vial, ha destacado que el alcohol sigue siendo un grave peligro en las carreteras españolas, ya que estuvo presente en el 29% de los accidentes mortales del año pasado. Además, señaló que los límites actuales de alcohol permitidos llevan 35 años sin cambios.

El peligro de conducir bajo los efectos del alcohol ha sido enfatizado por el diputado ponente de la propuesta, quien afirmó que un conductor ebrio no solo viola las normas de tráfico, sino que también destruye vidas y familias. Cada accidente causado por el alcohol es una tragedia que podría haberse evitado, por lo que es necesario actuar de inmediato.

Los socialistas argumentan que el consumo de alcohol durante la conducción es uno de los principales factores de riesgo y que, a pesar de los esfuerzos en concienciación, un 32,7% de los conductores fallecidos en 2023 tenían alcohol en su sistema. Esta reducción en el límite de alcohol permitido redundará en una mayor eficacia y seguridad en las carreteras.

Además, se destaca que países líderes en seguridad vial como Suecia y Noruega ya tienen un límite de 0,2 g/l, lo que demuestra que es una medida efectiva y respaldada internacionalmente. La sociedad española, según encuestas, respalda en gran medida la imposición de un límite de alcohol más estricto, lo que refuerza la necesidad de esta medida en España.