BRUSELAS, 1 de julio. En un reciente informe emitido por la Comisión Europea, se ha revelado que España ocupa la séptima posición en la lista de los países de la Unión Europea con la percepción más baja sobre la independencia de sus sistemas judiciales. Este análisis anual refleja las preocupaciones de los ciudadanos respecto al funcionamiento de los tribunales y la imparcialidad de los jueces en el país.

Los datos son preocupantes: apenas un 6% de los españoles afirma tener una opinión "muy buena" sobre la independencia judicial, mientras que un 33% considera que es "bastante buena". En contraste, más de la mitad de los encuestados manifiestan una percepción negativa, con un 32% indicando que es "bastante mala" y un 20% que la considera "muy mala". Un 9% prefirió no opinar al respecto.

Las cifras posicionan a España por detrás de varios países, siendo Polonia el que menos confianza genera, con un ínfimo 3% de opiniones "muy buenas" y un 21% "bastante buenas". También se encuentran en situaciones similares Bulgaria, Croacia, Eslovaquia, Grecia y Hungría, reflejando un clima de desconfianza en los sistemas judiciales de la región.

Cuando se indagan las causas de esta falta de confianza, un 42% de los ciudadanos españoles cita las "interferencias o presiones del gobierno y políticos" como el principal factor, mientras que un 40% menciona las injerencias de grupos económicos y de interés. Por otro lado, un 30,2% opina que el estatus de los jueces no asegura su independencia de manera adecuada.

Estas situaciones también se replican en el ámbito empresarial, donde España se encuentra nuevamente entre los últimos países del ranking respecto a la confianza en su sistema judicial. Solo un 7% de las empresas encuestadas en el Eurobarómetro creen que los tribunales y leyes del país garantizan de manera efectiva la protección de sus inversiones; otro 33% tiene una percepción "bastante buena". A la inversa, un 28% considera que la protección es "bastante mala" y un 16% "muy mala", mientras que el 16% restante decidió no opinar.