MADRID, 26 de septiembre.

Este viernes, la delegación española ha optado por no asistir a la intervención del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, en la Asamblea General de la ONU, tal y como ha confirmado el Ministerio de Asuntos Exteriores a Europa Press, aunque sin brindar mayores detalles sobre esta decisión.

Netanyahu fue el primer líder en tomar la palabra durante la última jornada de debates de la Asamblea, momento en el que múltiples delegaciones decidieron abandonar la sala en protesta por la reciente ofensiva militar israelí en Gaza.

A medida que la semana ministerial se acerca a su fin, el número de jefes de Estado y de Gobierno presentes en Nueva York se ha reducido considerablemente, y muchos han dejado de asistir a las sesiones de la ONU.

En esta ocasión, el Rey Felipe VI fue el encargado de representar a España al dirigirse a la Asamblea el miércoles por la mañana, tras lo cual regresó a Madrid, limitando así la representación española en el evento.

Además del Rey, tanto el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, como el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, estuvieron en Nueva York, pero ambos completaron su agenda el jueves y retomaron el viaje de vuelta a España.

En medio de la ausencia de los altos funcionarios, la representación española en la Asamblea podría haber recaído en algún secretario de Estado, como Diego Martínez Belío, quien también se encontraba en la ONU, o en el representante permanente de España ante las Naciones Unidas, Héctor Gómez, aunque finalmente no se registró presencia alguna de diplomáticos españoles en la sala.

Durante su discurso, Netanyahu rechazó las acusaciones de genocidio en Gaza, reiterando que tales afirmaciones, respaldadas por el Gobierno español y otros, son infundadas. Emplazó a la audiencia con una pregunta retórica: "¿Un país que comete genocidio enviaría mensajes a la población civil a la que supuestamente está tratando de eliminar, pidiéndoles que se evacuen?" haciendo alusión a los avisos emitidos por el Ejército israelí a los palestinos para que abandonen Gaza ante la ofensiva militar.