BUENOS AIRES, 28 de marzo - En un giro impactante durante el juicio que involucra a los profesionales de la salud que atendieron a Diego Armando Maradona, se han dado a conocer los resultados de la autopsia del legendario futbolista. Estos hallazgos revelan que Maradona sufrió un prolongado sufrimiento de hasta 12 horas antes de su fallecimiento, con fluidos acumulándose en su abdomen y pulmones.

Los informes iniciales sobre la causa de su muerte señalan que se trató de un edema pulmonar agudo acompañado de insuficiencia cardiaca y miocardiopatía dilatada. Esta información fue proporcionada por forenses durante el proceso judicial, según indicaron diversos medios argentinos.

El forense Carlos Mauricio Cassinelli, quien testificó ante el tribunal, enfatizó que la muerte de Maradona no fue inesperada y que su corazón tenía un tamaño que duplicaba el de un individuo promedio, lo que indica serias complicaciones de salud. Además, se detectó una acumulación preocupante de 4,5 litros de líquido en sus órganos, lo que sugiere que su estado se deterioró progresivamente días antes de su deceso.

Casi cuatro años después de su muerte, el juicio a siete profesionales médicos y enfermeras que brindaron atención a Maradona comenzó este martes. Entre los acusados, se encuentran su médico personal, Leopoldo Luque, y su psiquiatra, Agustina Cosachov, ambos enfrentando cargos de homicidio involuntario. Los implicados han rechazado firmemente las acusaciones, que podrían acarrear penas de hasta 25 años de prisión en caso de una condena.

El proceso legal ha enfrentado retrasos debido a cuestiones jurídicas aún no resueltas, pero se espera que continúe al menos hasta julio, con un total de 192 testigos convocados para declarar. Además, se ha separado el caso de otra enfermera, quien será juzgada de forma independiente en la segunda mitad del año.

Diego Maradona falleció el 25 de noviembre de 2020 a los 60 años en un complejo residencial privado al norte de Buenos Aires, poco después de haber sido sometido a una cirugía cerebral. Los investigadores han señalado que se produjeron errores significativos en su atención domiciliaria, lo que subraya la gravedad de su condición médica en los últimos días de su vida.