En todo momento apoyando la carrera deportiva de su hijo, la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin se han convertido en los grandes pilares de Pablo Urdangarin en cada uno de sus partidos con el Granollers. Esta vez, la infanta Cristina ha estado presente para respaldar a su hijo en su enfrentamiento contra el BM Huesca, donde una vez más, el joven ha demostrado su entrega al igual que el resto de sus compañeros.

Compartiendo confidencias y gestos de complicidad con la novia de su hijo, Johanna Zott, la infanta Cristina se ha mostrado serena a pesar del accidente sufrido por su hijo Miguel mientras esquiaba en Suiza y que requerirá intervención quirúrgica. Lejos de mostrar preocupación, la Infanta ha conversado animadamente con su nuera luciendo una bufanda del Granollers como símbolo de apoyo al equipo de su hijo. Además de Johanna, en esta ocasión la hija del rey Juan Carlos también estuvo acompañada por un amigo, mostrando una excelente relación de amistad.

Tras el encuentro, Pablo se reunió con su familia, previamente atendiendo a un grupo de seguidores que coreaban su nombre en muestra de apoyo. Divertido y cercano, Pablo y su madre intercambiaron gestos de cariño y cómplices, evidenciando la excelente relación que mantienen al mismo tiempo que el joven mostraba especial atención y cariño hacia Johanna, despidiéndose con un tierno beso en los labios.