En medio de su formación castrense en la Academia Militar de Zaragoza, la Princesa Leonor ha vivido una semana repleta de eventos significativos. Su participación destacada en los Premios Princesa de Girona, donde eclipsó a los Reyes Felipe y Letizia, así como a su hermana la Infanta Sofía, ha sido solo el inicio de una serie de acontecimientos memorables para la joven heredera.

El viernes, la Princesa de Asturias hizo su debut oficial a nivel internacional al visitar Portugal con el objetivo de fortalecer los lazos entre España y el país vecino. Su recibimiento por parte del Presidente de la República, Marcelo Rebelo de Sousa, en el Palacio de Belem, incluyó la imposición de la Gran Cruz de la Orden de Cristo, un importante reconocimiento que su padre recibió en 1988 durante su primer viaje a Portugal.

La jornada comenzó alrededor de las 10:30 horas en el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid Barajas, donde la Princesa Leonor se presentó deslumbrante para emprender su viaje a Lisboa acompañada del Ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares.

Con un estilo impecable y elegante, la princesa demostró estar a la altura de su papel como heredera al trono de Felipe VI y de la Reina Letizia, a quien homenajeó con su atuendo en el característico color rojo.

En un traje rojo España, la Princesa Leonor lució un look sofisticado y favorecedor que complementó con accesorios en tonos neutros. Su elección en cuanto al maquillaje resaltó sus labios y destacó su belleza natural.

Tras su llegada a Lisboa y el Cordón de Oro, la princesa visitó el Monasterio de los Jerónimos y fue recibida con honores en el Palacio de Belem, donde recibió la Gran Cruz de la Orden de Cristo. La agenda incluyó un almuerzo oficial y una visita al Oceanario de Lisboa, enfocada en la protección del medio ambiente y la conservación de los océanos.

La Princesa Leonor participó en una mesa redonda sobre la defensa del océano y las políticas oceánicas antes de regresar a España, poniendo así fin a su breve pero significativa visita a Portugal.