El dolor inunda el corazón de Inma Gamaza, quien ha llegado al velorio de su hija Michu con la tristeza reflejada en su rostro. Este miércoles, el tanatorio abrió sus puertas a las 11:30, y la madre ha sido una de las primeras en presentarse tras la trágica confirmación de que su hija falleció por un problema cardíaco congénito en la noche del lunes.

Con lágrimas en los ojos, Inma agradeció a los medios presentes por el apoyo recibido en este difícil momento. “Nos encontramos mal, mal... de verdad, gracias por estar aquí”, expresó, tocada por la compasión que la rodea luego de perder a su hija a tan corta edad.

La pérdida está siendo especialmente dura para la pequeña Rocío, de solo siete años, quien es hija de Michu y del famoso torero José Ortega Cano. Inma reveló que está intentando ayudar a su nieta a comprender lo sucedido. “Le he hablado de todo, y ella está… anoche rezó. Me dijo que lo había hecho y me dio un beso. Estoy intentando apoyarnos mutuamente”, contó con la voz entrecortada.

En medio de las especulaciones sobre el futuro de Rocío, que podría ir a vivir con la familia paterna, Inma se declaró decidida a quedarse con su nieta. “La niña se va a quedar conmigo. Michu siempre quiso lo mejor para ella, y desde pequeña ha estado conmigo”, afirmó con firmeza, explicando que aún no había tenido la oportunidad de hablar con Ortega Cano.

Las circunstancias alrededor de la muerte de Michu son desconcertantes. Inma explicó que su hija había estado esperando un marcapasos, un procedimiento que se había demorado más de lo esperado, dejando a la joven en una situación de riesgo. “Ella estaba en lista de espera. No sé por qué no se la pusieron antes; estaba en manos de los médicos”, lamentó Inma, claramente dolida por la falta de respuestas.

El momento de su fallecimiento fue repentino y devastador. “Estaba en su casa, preparándose para ir a Marbella con Rocío. De repente, empezó a sentirse mal y se tiró en la cama. Fue muy rápido”, narró la madre, quien no ha podido enfrentar la imagen de su hija sin vida, prefiriendo guardar recuerdos de ella en su mente.

A pesar del profundo dolor que enfrenta, Inma se siente alentada por la fortaleza de su nieta. “Rocío no comprende bien lo que ocurre. Me pregunta por su madre, y yo trato de explicarle que está en el cielo, como una estrella”, reveló. La pequeña ha comenzado a cargar una foto de Michu, prometiendo rezarle cada noche.

Ante la situación, Inma también ha recibido el apoyo de José Fernando y Gloria Camila, quienes han estado a su lado. “Es un apoyo para Rocío, le gusta que su papá esté aquí. Además, Gloria y Michu tenían una bonita relación”, aseguró Inma, destacando la complicidad entre las dos.

Finalmente, Inma concluyó con una emoción palpable: “Ahora, mi prioridad es cuidar de Rocío. Ella me da fuerzas, y yo quiero ser su soporte en este momento”. Con estas palabras, se despidió de su hija Michu, con la esperanza de mantener viva su memoria y fortalecer el vínculo con su nieta en los días venideros.