
El Manchester City consiguió una gran victoria por 3-0 contra el Bayern Múnich, poniendo un pie en las semifinales de la Liga de Campeones. En un partido en el que los contendientes ponían todo el esfuerzo desde el principio, el equipo inglés se mostró más fuerte, logrando una autoritaria victoria en el Etihad Stadium.
El equipo de Pep Guardiola tuvo menos errores que el de Thomas Tuchel, lo que les permitió ganar con mucha autoridad. Antes del momento clave del partido, en el que el Bayern Múnich cometió errores costosos que llevaron al 2-0, Rodri Hernández ya se había estrenado en la Champions con un gol espectacular. Mientras tanto, el campeón alemán se había acercado al empate en una reacción después del descanso.
El partido se jugó en condiciones climáticas difíciles, con lluvia y viento. Sin embargo, tanto el City como el Bayern atacaron sin reservas desde el principio, especialmente los locales, que buscaron el primer gol con determinación pero con poco acierto. El conjunto bávaro supo aguantar bien los primeros minutos y esperó sus oportunidades para intentar acercarse al área de Ederson, apoyándose en la calidad de sus jugadores de ataque, especialmente Leroy Sané, pero echando en falta una referencia real debido a la baja de Choupo-Moting. El City, por su parte, tenía a Haaland, pero no asustó demasiado en la primera parte.
A pesar de esto, Haaland fue el responsable del primer disparo del partido en un primer tiempo muy parejo. El aviso visitante más serio vino de Musiala, cuyo disparo se encontró con el pie salvador de Rubén Dias, evitando el posible 0-1. Poco después, el City logró su primer gol. Rodri, que normalmente es diestro, sacó un impresionante disparo con la zurda desde fuera del área para superar a Sommer y poner a los locales por delante antes de la media hora de juego.
El Bayern sintió el golpe después del primer gol de Rodri en Champions. El City, que estaba siendo generoso tanto en ataque como en defensa, aumentó su nivel para ir a buscar el 2-0, que estuvo cerca de llegar con un remate de Gündogan después de una salida fallida de Sommer, que compensó su error con un pie milagroso. El hexacampeón de Europa sufrió pero logró aguantar hasta el final del primer tiempo, amenazando con un disparo peligroso de Sané.
El delantero alemán siguió siendo peligroso después del descanso con tres disparos, especialmente el segundo, que exigió una gran intervención de Ederson. Entre medias, los locales también estuvieron cerca de marcar después de una indecisión de Upamecano que generó una situación caótica en su área. Sin embargo, Haaland no logró aprovecharla y su disparo se estrelló contra Kimmich. El campeón de la Bundesliga seguía creciendo y casi logró el empate gracias a un cabezazo de De Ligt que fue repelido por la espalda de Aké.
Los de Guardiola despertaron y aumentaron su presión, aunque ya no pudieron tener tanta posesión como en la primera parte. El partido se abrió y ambos entrenadores movieron sus piezas, ingresando a Julián Álvarez y Sadio Mané en lugar de De Bruyne y Musiala, respectivamente.
Sin embargo, Tuchel no contaba con otro error de Upamecano, que perdió el balón cerca de su área contra Grealish, quien con taconazo a la entrada de Haaland terminó asistiendo a Bernardo Silva para que anotara el 2-0. El Bayern quedó aturdido y a merced del City. Julián Álvarez estuvo cerca de marcar el tercer gol, pero Sommer logró otra gran intervención. Haaland, por su parte, no perdonó en su mejor oportunidad del partido, marcando el tercer y definitivo gol. El Bayern no logró encontrar la puerta contraria y Sommer aún tuvo tiempo para otra parada milagrosa, evitando una derrota aún peor.
El árbitro del partido fue Gil Manzano de España, quien amonestó a Bernardo Silva del City y a Davies y Pavard del Bayern.
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