La Reina Sofía reafirma su compromiso con la cultura, desmarcándose de la controversia en torno a su esposo, el Rey Juan Carlos, al asistir a un concierto en el Auditorio Nacional

MADRID, 9 Abr. (CHANCE) -

En medio del torbellino que envuelve al Rey Juan Carlos, quien enfrenta una serie de procedimientos legales en contra del ex presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, y de la demanda planeada hacia su ex compañera cercana, Corinna Larssen, la Reina Sofía ha decidido enfocar su energía en la música y la cultura. Esto quedó claramente demostrado en su inesperada aparición en el Auditorio Nacional, un evento que no formaba parte de su agenda habitual.

Desplazándose sola, la madre del Rey Felipe VI acudió este martes al concierto que presentaba 'Carmina Burana, Orff / Réquiem, Mozart', interpretada por la Orquesta Filarmónica de Minsk y el Coro de la Filarmónica de Chisináu, reafirmando así su inquebrantable apoyo al sector cultural y musical en España.

Al salir del evento, Doña Sofía lucía radiante y se despidió de las personalidades presentes con una calidez genuina. Aunque el ambiente mediático gira en torno a los problemas legales que enfrenta el Rey Juan Carlos por su relación pasada con Corinna Larssen, la Emérita optó por mantener una actitud serena y despreocupada tras el concierto, sin hacer comentarios sobre la situación.

La elegancia de su Majestad fue innegable, apostando por un estilo sobrio que incluía pantalones negros, una blazer de terciopelo del mismo tono y una blusa satinada blanca, todo lo cual resaltaba su imagen de dignidad y respeto en un momento personal tumultuoso para su familia.