MADRID, 24 de julio. - En un emocionante regreso a la capital española, Alejandra Rubio ha compartido momentos de calidad junto a Carlo Costanzia y su pequeño Carlo Jr. Tras unos días de descanso en Ibiza, donde la presencia de la modelo Mar Flores ha generado murmullos sobre las dinámicas familiares, la joven ha reafirmado su cercanía con Terelu Campos. Se especula que Alejandra se siente más a gusto con su familia política, pero ella ha hecho oídos sordos a tales rumores al disfrutar de una cena íntima con su madre y su pareja.

Solo unas horas después de su presentación teatral en Murcia con la obra 'Santa Lola', la presentadora se reunió con su hija y su yerno en un popular restaurante de la zona. Esta salida sirvió para manifestar que, al igual que su conocida amiga Mar Flores, la conexión familiar es un pilar en su vida, a pesar de que en esta ocasión, el pequeño Carlos se quedó en casa.

La noche se desarrolló entre risas y relatos de sus vacaciones recientes. Terelu también compartió un viaje a la República Dominicana, que desafortunadamente la dejó un poco indispuesta debido a un virus estomacal. A medida que madre e hija compartían confidencias, Carlo caminaba unos pasos delante, mostrando una expresión más seria mientras se dirigía a su vehículo.

Sin embargo, la actitud de Alejandra contrastaba con la seriedad de Carlo. Radiando felicidad, ella estuvo atenta a su madre, disfrutando de la cena y desmintiendo cualquier rumor sobre su preferencia por su suegra. Para dejar claro el vínculo que comparten, los tres fueron vistos abandonando el restaurante en el coche del italiano, quien con gestos caballerosos llevó a Terelu de regreso a su hogar.