En una trágica madrugada que dejó una huella profunda en la comunidad de Villafranca de Ebro, un devastador incendio arrasó la residencia de ancianos Jardines de Villafranca, resultando en la muerte de diez personas y dejando a dos más con heridas de gravedad. Esta sombría noticia fue comunicada por fuentes del Gobierno de Aragón, quienes han seguido de cerca los acontecimientos.

El siniestro fue reportado a través del servicio de emergencias 112 a las 4:57 horas, lo que llevó al Cuerpo de Bomberos de Zaragoza a movilizarse rápidamente hacia el lugar. Tras enfocar sus esfuerzos en extinguir el fuego, los bomberos descubrieron con horror el resultado de la tragedia: diez personas que no lograron sobrevivir y dos más que requirieron atención médica urgente, siendo trasladadas al Hospital Royo Villanova, una en estado grave y otra en situación crítica.

Al llegar a la residencia, que albergaba a 82 ancianos en el momento del incendio, los bomberos se encontraron con un escenario de caos. El fuego había tomado un ala del edificio, causando una densa nube de humo que saturó casi por completo el recinto. Inmediatamente, se iniciaron las operaciones de extinción y extracción del humo, seguido de la crucial evacuación de los ancianos hacia un Puesto Sanitario Avanzado, donde el personal sanitario atendió a varios afectados con intoxicaciones leves.

El despliegue de recursos para combatir la emergencia fue significativo, incluyendo la movilización de 25 bomberos, tres camiones cisterna y una autoescala, además de una ambulancia y un puesto sanitario avanzado. Posteriormente, se unieron fuerzas adicionales, como un autobús y un furgón de herramientas, según los informes proporcionados por Bomberos de Zaragoza.

A la escena se han sumado el equipo de Bomberos del Ayuntamiento de Zaragoza, los servicios médicos del 061, la Guardia Civil y voluntarios de Protección Civil, quienes están ofreciendo apoyo junto a psicólogos y trabajadores sociales. Asimismo, el personal médico de los centros de salud de Alfajarín y Fuentes de Ebro está presente para reforzar el esfuerzo de atención a las víctimas.

Por otro lado, los hospitales Royo Villanova, Miguel Servet y Clínico Universitario han sido prealertados para prepararse ante cualquier eventualidad, asegurando que estén listos para recibir a los heridos que puedan necesitar atención especializada, según han indicado fuentes de la Guardia Civil.

En una muestra de compromiso y solidaridad, el consejero de Hacienda, Interior y Función Pública del Gobierno de Aragón, Roberto Bermúdez, junto al gerente del Instituto Aragonés de Servicios Sociales (IASS), Ángel Val, se encuentran en camino hacia la zona afectada para evaluar la situación y coordinar los esfuerzos de respuesta ante esta devastadora tragedia que ha golpeado a la comunidad.