Elon Musk ha expresado de manera contundente que nunca estuvo al tanto del controvertido proyecto de ley fiscal que ha generado tensiones entre él y la administración Trump. En medio de una caída significativa de las acciones de Tesla, el empresario ha fijado su postura en un tuit, donde subraya que no tuvo acceso a la información del proyecto y que este fue aprobado sin la debida transparencia.

Desde la Casa Blanca, el expresidente Donald Trump no ha escatimado en críticas hacia Musk, manifestando su profunda decepción por las declaraciones del magnate. Según Trump, Musk, por haber estado más cerca de su administración, debería haber estado mejor informado sobre los detalles de la legislación, algo que el empresario ha negado rotundamente.

Trump ha sugerido que las quejas de Musk están vinculadas a las medidas contempladas en la ley que impactan negativamente a la industria de vehículos eléctricos, un sector en el que el empresario tiene intereses significativos. El exmandatario considera que Musk debería tener un enfoque más positivo ante el desarrollo de una legislación que, afirma, tiene ventajas para todos los tipos de vehículos.

A medida que avanza la crítica entre ambos, Trump ha recordado una relación que solía ser cordial. “Nunca tuvo problema alguno con este proyecto hasta que decidió que no le convenía”, sostuvo, añadiendo que la colaboración había sido beneficiosa para Musk hasta el momento en que comenzaron las diferencias.

La polémica legislación, que fue aprobada en la Cámara de Representantes con un margen ajustado, extiende beneficios y recortes fiscales que afectan a varios sectores, incluyendo la eliminación de impuestos sobre horas extra y propinas, así como reducciones en programas de salud pública. Todo esto bajo la promesa de la administración de fomentar el crecimiento económico.

En respuesta a los comentarios de Trump, Musk utilizó la plataforma X, que él mismo posee, para rechazar las acusaciones. Afirmó que el proyecto de ley se aprobó de manera apresurada y sin el debido debate en el Congreso, instando a los legisladores a revisar sus propuestas con más cuidado antes de tomar decisiones que podrían perjudicar a la economía y al medio ambiente.

El CEO de Tesla también ha reiterado sus preocupaciones sobre el trato desigual hacia diferentes energías en el proyecto, argumentando que los subsidios para combustibles fósiles siguen vigentes mientras se recortan incentivos para energías limpias, lo que considera una clara injusticia que merece ser denunciada.

Los pronunciamientos de Musk sobre este asunto han sido contundentes y han incluido llamados a la acción, exhortando a los ciudadanos a comunicarse con sus representantes para dar un freno a lo que él llama una "abominación repugnante". Este clima de confrontación ha tenido un impacto directo en Tesla, cuyas acciones experimentaron una caída del 9% en Wall Street a raíz del intercambio de acusaciones entre estas figuras influyentes.