En un desarrollo significativo dentro del ámbito judicial español, el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) ha anunciado este miércoles que Ricardo Conde, encargado de la Acción Disciplinaria, ha decidido iniciar una diligencia informativa que examinará la conducta del magistrado Adolfo Carretero, del Juzgado de Instrucción número 47. Esta decisión ha sido motivada por las denuncias surgidas tras sus intervenciones en los interrogatorios llevados a cabo el 16 de enero en torno a la actuación de la actriz Elisa Mouliaá y del ex político Íñigo Errejón.

Según una nota publicada por Europa Press, la Unidad de Atención Ciudadana del CGPJ ha recibido hasta la fecha más de 900 quejas y denuncias relativas al comportamiento del magistrado Carretero, luego de que el pasado 20 de enero se difundiera en los medios una grabación de las declaraciones de ambas partes involucradas en el caso. La apertura de estas diligencias por parte de Conde representa un paso preliminar en la evaluación de si se llevará a cabo un expediente disciplinario en contra del magistrado, lo cual refleja la seriedad con que el CGPJ está manejando la situación.

En el contexto de los interrogatorios, del que Europa Press ha tenido acceso, se ha podido observar que el juez Carretero cuestionó en múltiples ocasiones la versión presentada por Mouliaá sobre los eventos que supuestamente ocurrieron en septiembre de 2021, en el marco de la denuncia de agresión sexual contra Errejón. Estos interrogatorios han generado una considerable controversia, lo que ha llevado a una creciente presión pública sobre cómo se están manejando estos casos en el sistema judicial español.