El Gobierno logró evitar las comparecencias extraordinarias en el Congreso este martes gracias al apoyo de sus aliados y a algunos empates en la Diputación Permanente.

El órgano que sustituye al Pleno del Congreso votó en diez ocasiones las peticiones del PP para que distintos miembros del Gobierno comparecieran urgentemente, pero el PSOE y sus aliados lograron superar todas las votaciones, aunque no siempre estuvieron todos presentes.

PP y Vox respaldaron todas las peticiones de comparecencia, mientras que ERC, PNV y Bildu apoyaron al Gobierno, argumentando que no había motivos urgentes. Junts y Podemos variaron su posición dependiendo del tema en cuestión.

La mayoría absoluta en la Diputación Permanente se alió para rechazar las peticiones de comparecencia sobre Venezuela, pero se produjeron empates en temas como la crisis migratoria, donde Podemos fue clave en la decisión.

Podemos también influyó en la decisión sobre el concierto económico para Cataluña y la reaparición de Puigdemont, donde se rechazaron las comparecencias gracias a su voto en contra. En temas como las incidencias en la red ferroviaria, los empates favorecieron al Gobierno.