El director general del Organismo Internacional para la Energía Atómica (OIEA), Rafael Grossi, ha puesto rumbo a Kiev, la capital de Ucrania, para llevar a cabo una inspección de seguridad nuclear en medio de la invasión rusa del país. Esta invasión, ordenada por el presidente de Rusia, Vladimir Putin, comenzó el 24 de febrero de 2022.

En su undécima visita a Ucrania desde el inicio de la guerra, Grossi se dirigirá a la subestación de Kiev, crucial para la seguridad energética del país, con el objetivo de evaluar los daños y prevenir posibles accidentes nucleares. Así lo anunció a través de un breve comunicado publicado en su perfil de la red social X.

El director del OIEA destacó que "una red cada vez más frágil representa un riesgo creciente para todas las centrales nucleares en Ucrania, no solo para la de Zaporiyia (en Enerhodar), que es la central nuclear más grande de Europa y una de las diez más grandes del mundo.

La semana pasada, el OIEA informó que llevaría a cabo una misión en Ucrania liderada por Grossi esta semana, demostrando así su compromiso inquebrantable de apoyar la seguridad nuclear en el país. En medio de la guerra, el OIEA continuará activo, enfocado en brindar apoyo en circunstancias extremadamente difíciles.

El equipo del OIEA en la central nuclear de Zaporiyia ha escuchado explosiones diarias provenientes del exterior de la planta, aunque hasta el momento no se han reportado daños en la central. Sin embargo, la semana pasada se observó condensación en el interior del edificio de contención de la quinta unidad del reactor, un problema que será investigado más a fondo por el equipo del OIEA. Por otro lado, las salas del sistema de seguridad se encontraban en buen estado.