El Papa León XIV ha manifestado su sincero agradecimiento a la Secretaría de Estado del Vaticano, liderada por el cardenal Pietro Parolin, figura destacada durante el reciente Cónclave. En una audiencia celebrada el pasado jueves, el Pontífice compartió que siente una profunda satisfacción al saber que no está solo en su labor.

Durante su discurso, León XIV enfatizó la importancia del trabajo en conjunto, afirmando que la carga de su ministerio no puede recaer únicamente en sus manos. "Es fundamental contar con la colaboración de muchos en la Santa Sede", resaltó, subrayando su reconocimiento hacia el apoyo brindado por la Secretaría de Estado.

El Papa recordó la rica historia de esta institución, que data de finales del siglo XV, y cómo ha evolucionado a lo largo de los años para adaptarse a los nuevos retos en el ámbito religioso y en las relaciones con gobiernos y organizaciones internacionales.

En una nota inclusiva, León XIV destacó que casi la mitad de los integrantes de la Secretaría son laicos, y que más de 50 de ellos son mujeres, tanto laicas como religiosas. Esta diversidad, según el Papa, refleja el rostro actual de la Iglesia como una comunidad activa que enfrenta y comparte las inquietudes y esperanzas del Pueblo de Dios.

El Papa también recordó la función esencial de la Secretaría de Estado en la reciente Constitución Apostólica Praedicate Evangelium, que reafirma su rol coordinador en diversas tareas, lo que incluye la gestión de las Secciones para los Asuntos Generales, y las Relaciones con Estados y Organismos Internacionales, cuyo objetivo es cuidar las relaciones diplomáticas en un contexto histórico delicado.

León XIV subrayó la importancia de la Sección para el Personal Diplomático de la Santa Sede, cuyo trabajo es vital para el funcionamiento de las Representaciones Pontificias y la atención al Cuerpo Diplomático en Roma y en el mundo. Sin embargo, el Papa también reconoció que estas responsabilidades son desafiantes y a menudo pueden ser malinterpretadas.

Con gratitud, el Pontífice expresó su apoyo y agradecimiento por la dedicación de quienes sirven a la Iglesia, resaltando su trabajo silencioso y el espíritu evangélico que lo guía. "Gracias por su competencia y compromiso", añadió, refiriéndose al esfuerzo colectivo que cada uno aporta.

Finalmente, citando a san Pablo VI, el Papa instó a los integrantes de la Secretaría a trabajar en un ambiente libre de ambiciones personales y rivalidades, promoviendo un espacio de verdadera comunidad basada en la fe y la caridad, donde todos sean considerados hermanos y colaboradores del Papa.