
Los accionistas de Ferrovial han sacado adelante la propuesta para trasladar su sede social a Países Bajos con un 93,3% de los votos a favor durante la junta de accionistas de la compañía. El quórum de la asamblea llegó al 77,6% entre asistentes y representantes y de ellos ese 93,3% dio su visto bueno al punto 10.1 del orden del día, el que trataba la fusión con su filial neerlandesa.
El presidente de la compañía, Rafael del Pino, controla el 20,4% del capital y es el principal accionista de Ferrovial, seguido de su hermana María del Pino (8,2%) y el fondo británico TCI (6,4%). En cualquier caso, todavía está abierta la posibilidad de que un 6,7% de los accionistas que ha votado en contra ejerza su derecho de separación, es decir, venda sus acciones a la empresa por su oposición a la ejecución de este traslado.
Si solo un 2,56% de los accionistas lo ejerce en el plazo de un mes, la operación no saldrá adelante, ya que la contraprestación a pagar por Ferrovial superará el límite de 500 millones de euros que la empresa fijó en las condiciones de la operación. A pesar de esto, se espera que un porcentaje bajo de accionistas haga uso de este derecho.
La operación ha sido apoyada por todos los accionistas presentes en la junta, incluso criticando al gobierno por oponerse a la ejecución de este traslado. Además, las firmas asesoras de gobierno corporativo han destacado el potencial de este movimiento corporativo, que en última instancia mejorará el rendimiento para los accionistas.
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