En una reciente declaración, el ministro de Relaciones Exteriores de Israel, Gideon Saar, dejó claro que su gobierno no cederá ante las exigencias de la comunidad internacional para finalizar la ofensiva en Gaza ni para aceptar la creación de un Estado palestino. "No habrá un Estado palestino, eso es algo que está fuera de discusión", afirmó durante una conferencia de prensa, desestimando las solicitudes globales de soluciones pacíficas en la región.

Saar criticó lo que denominó una "campaña distorsionada" que presiona a Israel, alertando que esto podría llevar a Hamas a consolidarse aún más en el poder en Gaza. "No importa qué tan fuerte sea la presión, la creación de un Estado palestino no sucederá. Es una realidad que no vamos a permitir", expuso, enfatizando su punto de vista sobre la situación actual y los intereses de su país.

El ministro también advirtió que la verdadera agenda detrás de la presión internacional es obligar a aceptar una solución de dos Estados, un escenario que no ve como viable. "Lo que se propone es establecer un Estado de Hamas, que sería fundamentalmente un Estado yihadista. Esto no va a suceder", sostuvo, señalando a los gobiernos europeos por facilitar políticas que responden a la creciente presencia de la población musulmana en sus territorios.

Refiriéndose a lecciones históricas, Saar comparó la postura de Israel con la de Checoslovaquia ante el expansionismo nazi en la década de 1930, afirmando que su país no permitirá que su seguridad se vea comprometida por la presión externa. "No vamos a sacrificar nuestra existencia para contentar a otros", declaró con firmeza, subrayando que tampoco renunciarán a sus derechos fundamentales como nación.

Por último, el ministro subrayó que la presión ejercida desde el exterior no solo es contraproducente, sino que pone en riesgo cualquier posibilidad de un alto el fuego o un acuerdo que contribuya a la liberación de los rehenes. "La atención internacional debería dirigirse hacia Hamas, no hacia Israel", concluyó, dejando claro su desdén por la dinámica actual de las relaciones internacionales en el conflicto israelí-palestino.