En una rueda de prensa, el portavoz del Departamento de Estado de Estados Unidos, Matthew Miller, ha condenado la decisión de Israel de retener 130 millones de shekels destinados a la Autoridad Palestina tras los recientes ataques perpetrados por Hamás el 7 de octubre. Según Miller, estos fondos pertenecen al pueblo palestino y deben ser transferidos de inmediato sin demoras.

Miller ha destacado la importancia de que la Autoridad Palestina tenga acceso a estos fondos para mantener la estabilidad en Cisjordania, especialmente después de los ataques de Hamás. Además, ha señalado que la retención de estos fondos no solo perjudica al pueblo palestino, sino también pone en riesgo la seguridad de Israel al desestabilizar la región.

Por su parte, el ministro de Finanzas de Israel, Bezalel Smotrich, defendió la decisión argumentando que la Autoridad Palestina apoya el terrorismo al pagar a las familias de terroristas. Sin embargo, el Banco Mundial ha advertido sobre un posible colapso financiero de la Autoridad Palestina debido a la suspensión de las transferencias de impuestos y la disminución de la actividad económica tras los recientes eventos en la región.

Desde la firma de los Acuerdos de Oslo en 1993, Israel recauda fondos en nombre de la Autoridad Palestina y los transfiere mensualmente, aunque estas entregas han sido suspendidas en varias ocasiones debido a las tensiones en el conflicto palestino-israelí. La comunidad internacional ha instado a Israel a reconsiderar su decisión y garantizar que los fondos lleguen a su destino final para evitar un empeoramiento de la situación en la región.