En un emocionante desarrollo que ha capturado la atención del mundo, la misión de SpaceX ha alcanzado la Estación Espacial Internacional (EEI) para traer de vuelta a casa a dos astronautas estadounidenses que se encontraban en una situación inesperada desde junio del año pasado. Este domingo por la mañana, se dio la bienvenida a la nave Falcon 9, la cual fue lanzada con éxito el pasado viernes por la noche.

“¡Acoplamiento confirmado!” fue el mensaje de alegría lanzado por SpaceX a través de su cuenta en la plataforma X, donde compartieron el instante crucial en que la nave se unió a la EEI, marcando un hito en esta operación espacial.

La nave Dragon, que se lanzó en la misión, transportaba a un grupo diverso de astronautas, entre ellos las estadounidenses de la NASA, Anne McClain y Nichole Ayers, el astronauta japonés Takuya Onishi y el cosmonauta ruso Kirill Peskov. Este equipo ahora se prepara para recibir a los astronautas estadounidenses Barry Wilmore y Sunita Williams, quienes se han convertido en los protagonistas de una inusual odisea en el espacio, junto con el cosmonauta Aleksandr Gorbunov.

Se espera que la cápsula despegue de la EEI a más tardar el 19 de marzo, según anunciaron fuentes de la NASA y SpaceX. La llegada de la nueva tripulación se considera fundamental para facilitar la transición y garantizar que las operaciones de mantenimiento y científicas continúen de manera fluida a bordo de la estación espacial.

En una reciente rueda de prensa, Williams y Wilmore expresaron que, a pesar de la prolongación inesperada de su estancia en el espacio, no se han sentido abandonados por la NASA. Wilmore, en particular, destacó que la necesidad de obtener suministros extra no ha sido un obstáculo, ya que han podido administrar eficientemente los recursos disponibles desde su llegada.

Ambos astronautas llegaron a la EEI a principios de junio durante la fase de prueba del Starliner de Boeing, con la expectativa de un breve viaje de una semana. No obstante, una serie de contratiempos técnicos les ha llevado a permanecer más tiempo del planeado en el complejo orbital, donde continúan aportando su valiosa experiencia hasta el regreso a casa.