
MARBELLA, 5 Jul. (PROGRESO) -
Durante el vibrante concierto de Marc Anthony en el famoso Starlite de Marbella, una serie de personalidades del mundo del espectáculo se hicieron presentes, entre ellas la modelo Lucía Rivera. Junto a ella, se reconocieron a figuras como Nuria Fergó, Marisa Jara y Alma Bollo, quienes compartieron una noche de música y entretenimiento.
Sin embargo, el ambiente festivo se vio empañado por las recientes polémicas que rodean a su padre, Cayetano Rivera, quien fue arrestado tras un incidente en una reconocida hamburguesería de Madrid. Según informes, el torero mostró una conducta desafiante y hostil al enfrentarse a la policía, que fue llamada por los empleados del local para que se marchara.
Frente a las cámaras, Lucía optó por no ahondar en su vida familiar, eludiendo las preguntas sobre si había mantenido contacto con su padre desde el altercado. A lo largo de su carrera, ha procurado mantener su vida personal alejada del escrutinio público y este momento no fue la excepción.
Su reacción es comprensible, ya que es habitual que Lucía busque permanecer en un segundo plano, especialmente cuando surgen controversias que involucran a su padre. Un ejemplo de ello fue su silencio previo ante la noticia de su separación con María Cerqueira, que también atrajo la atención mediática en su momento.
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