El presidente de Argentina, Javier Milei, ha expresado su indignación ante la decisión del Gobierno español de retirar definitivamente a la embajadora en Buenos Aires, calificando la medida como un acto de arrogancia por parte de un socialista. En una entrevista a LN+, Milei ha criticado al presidente del Ejecutivo español, Pedro Sánchez, y ha asegurado que este se convertirá en el ridículo de todo el mundo por su comportamiento en un asunto de índole personal.

Para Milei, Sánchez no es la representación de España, y mucho menos lo es su esposa. El presidente argentino ha insinuado que Sánchez ha malinterpretado su discurso del domingo por sentirse culpable de algo, y ha cargado nuevamente contra Begoña Gómez, a pesar de haber aclarado que no la mencionó en el evento organizado por Vox.

Milei ha aprovechado para criticar al kirchnerismo y ha sugerido que en vez de recomendarle a él terapia, la oposición argentina debería instar a Sánchez a acudir a un psicólogo para que madure. Además, ha ironizado recomendando un buen abogado para Begoña.

El líder argentino considera que Sánchez estaba buscando un escándalo de esta magnitud, pero que le salió mal, resultando en una situación ridícula para él. Milei ha afirmado que Sánchez parece creerse el Estado y ha insinuado que solo podría entenderse con países como Cuba, Venezuela y Corea del Norte.

En este sentido, Milei ha reiterado sus críticas al socialismo, describiéndolo como un sistema "cancerígeno", y ha mencionado la injerencia del Gobierno español en asuntos internos argentinos al apoyar al peronista Sergio Massa durante las elecciones presidenciales.

El líder argentino ha criticado a Sánchez por supuestamente delegar las críticas en mujeres para luego acusarlo de misoginia, calificándolo de cobarde. Pese a las tensiones, Milei ha descartado tomar medidas diplomáticas y no cree que la situación tenga consecuencias económicas a largo plazo.

Milei confía en que los lazos entre Argentina y España se mantengan a pesar de estas polémicas políticas, y ha minimizado las presiones que asegura han sufrido los empresarios argentinos tras su reunión con ellos el pasado sábado.