En un giro inesperado en el complicado panorama de la guerra entre Rusia y Ucrania, los soldados norcoreanos capturados por las fuerzas ucranianas no han sido incluidos en el reciente intercambio masivo de prisioneros, que tuvo lugar este fin de semana en Estambul. Este acuerdo, que supone la liberación de hasta mil prisioneros, ha dejado fuera a estos dos militares, generando cuestionamientos sobre su futuro.

La noticia fue confirmada por Yu Yong Weon, un diputado del oficialista Partido del Poder Popular de Corea del Sur, quien habló con la agencia de noticias Yonhap. Los soldados, conocidos por los apellidos Ri y Baek, fueron capturados en enero y, sorprendentemente, no formaron parte del canje que había despertado tantas esperanzas de reconciliación.

Yu, que tuvo la oportunidad de reunirse con los soldados durante su visita a Ucrania en febrero, reveló que la decisión de no incluirlos se basó en una solicitud del gobierno surcoreano. Este último espera que los soldados expresen su deseo de desertar del régimen norcoreano, un deseo que Ri ya habría manifestado de manera informal tras su captura, debido a las consecuencias que podría acarrear su regreso a Corea del Norte.

La situación se complica aún más con el despliegue de alrededor de 11.000 soldados norcoreanos en octubre de 2024, quienes fueron enviados a apoyar a Rusia en la lucha por la recuperación de Kursk. Este incidente marcó la primera vez que Corea del Norte intervino de esta manera fuera de sus fronteras desde el inicio del conflicto, lo que plantea interrogantes sobre sus ambiciones militares en la región.

En el contexto actual, es importante señalar que Rusia ha logrado recuperar casi la totalidad de los territorios que al principio cayeron bajo el control ucraniano, lo que añade una capa adicional de tensión y complejidad a un conflicto que sigue evolucionando con el paso del tiempo.