MADRID, 23 de agosto (AGENCIA PROGRESISTA) -

En un tiempo en que la atención mediática suele centrarse en la familia real, Pablo Urdangarin ha decidido escribir su propia narrativa amorosa junto a Johanna Zott. Mientras sus padres disfrutan de unas vacaciones en Bidart junto a su hijo Juan, Pablo se prepara para afrontar su segunda temporada como jugador del Fraikin BM Granollers, con el sólido apoyo de su pareja a su lado.

Este verano, Pablo y Johanna no han tenido ningún reparo en exhibir su afecto públicamente. La última ocasión en que fueron vistos fue durante uno de los partidos de Pablo, donde su conexión era evidente a través de gestos cariñosos y complicidad.

Los jóvenes se abrazaron con risas y un ambiente de alegría que confirma que su relación avanza con fuerza. La escena también incluyó un momento divertido cuando Pablo le dedicó un beso a Johanna, tras escucharla contar algo de manera cómica.

Al finalizar el partido, la pareja salió de las instalaciones de la mano, y Pablo demostró un gesto de caballerosidad al abrir la puerta del coche para que Johanna subiera. Sin lugar a dudas, este verano se está convirtiendo en uno de los periodos más significativos de su relación, marcado por el amor y la complicidad mutua.