En una jornada llena de controversia, el atleta portugués Pedro Pichardo puso en duda el impresionante salto de 18,18 metros del español Jordan Díaz que le valió el título de campeón de Europa en el torneo celebrado en Roma, Italia. Pichardo cuestionó la validez de la distancia alcanzada y señaló la extraña situación de que la regla electrónica estuviera apagada en ese momento.

En un mensaje publicado en sus redes sociales, Pichardo afirmó su integridad como atleta y su respeto por la competición, manifestando su preocupación por la situación ocurrida en el foso durante la prueba. Solicitó a las autoridades correspondientes una rápida respuesta y aclaración sobre lo sucedido en relación al sorprendente salto de Díaz.

La competición en el Estadio Olímpico de Roma culminó con Jordan Díaz alcanzando los 18,18 metros en su salto final para adjudicarse la medalla de oro. Esta marca le situó por delante de Pedro Pichardo, que logró 17,92 metros, y Anaël-Thomas Gogois, que obtuvo el bronce con 17,38 metros. Sin embargo, la polémica surgió al apagarse la regla electrónica en el momento clave.

Pichardo expresó su sospecha de un posible amaño al destacar la actitud de Díaz al celebrar su salto antes de que se realizara la medición oficial, argumentando que es difícil determinar la calidad del mismo sin una referencia clara. La regla electrónica volvió a funcionar cuando Pichardo se disponía a saltar, alimentando las sospechas del atleta portugués.

El descontento de Pichardo se hizo evidente al señalar las circunstancias inusuales del evento, destacando la falta de transparencia en el proceso de medición. Jordan Díaz también expresó su emoción en redes sociales, aumentando aún más la tensión en torno a este polémico desenlace en el campeonato de Europa.