En la jornada del sábado 12 de abril, Ione Belarra fue ratificada como secretaria general de Podemos, consolidando su liderazgo con un impactante 90% de respaldo por parte de los militantes que acudieron a la quinta asamblea ciudadana del partido. Sin embargo, este evento se ha visto marcado por una notable disminución en la participación, pasando de los más de 51.500 votos en 2021 a tan solo 27.172 en esta ocasión.

Este descenso en la participación representa una caída alarmante, con casi 24.500 miembros menos que en la anterior asamblea. La disminución de casi el 50% en la votación refleja un panorama complicado para la formación, que busca revitalizar su conexión con las bases en un momento de transformaciones internas.

Con la reelección de Belarra, Podemos entra en una nueva fase en la que el partido pretende reforzar su estrategia junto a la exministra de Igualdad, Irene Montero, quien ha sido designada como referente electoral de cara a los próximos comicios generales. Este movimiento busca dar continuidad a la misión del partido en un contexto político desafiante.

La predecible reelección de Belarra, al ser la única que logró los apoyos necesarios, sienta las bases para una dirección que también preserva a su equipo cercano dentro del Consejo Ciudadano estatal. Entre los miembros más destacados se encuentran Montero, el secretario de Organización Pablo Fernández, y figuras clave como Isa Serra y Julio Rodríguez, además de varios representantes autonómicos.

La nueva dirección también busca renovarse, incorporando a una docena de activistas, entre los que se destaca a Mar Cambrollé, referente del movimiento trans. Asimismo, se suman al equipo el periodista Mariano Muniesa y la politóloga Dina Bousselham, buscando así enriquecer la diversidad y la experiencia del liderazgo del partido.

A pesar de este avance, el Consejo Ciudadano pierde a varias figuras emblemáticas, considerando la salida del exportavoz Pablo Echenique y otros miembros como Rafa Mayoral y Ángela Rodríguez 'Pam'. El partido ha manifestado su satisfacción por las relaciones mantenidas con estos exintegrantes, quienes han decidido dar un paso atrás en la esfera política de mayor visibilidad.