En un golpe contra el tráfico de migrantes, la Policía Nacional ha detenido al líder de una organización criminal internacional en Toledo. Esta banda se dedicaba a facilitar la llegada de migrantes sirios y argelinos a España a través de rutas que partían desde Beirut.
Según informó la Policía este jueves, la red delictiva cobraba hasta 10.000 euros por migrante a cambio de su traslado, estancia en España y tránsito a otros países europeos. Aquellos que no pagaban la deuda eran víctimas de violencia por parte de la organización.
La investigación se inició a raíz de una operación previa que reveló la existencia de una red asentada entre Madrid y Toledo. Esta red, coordinada con una célula matriz en Argelia, utilizaba embarcaciones rápidas para trasladar a los migrantes desde las costas de África a las de Almería y Murcia.
Las travesías de los migrantes eran principalmente nocturnas y se realizaban en condiciones precarias, sin medidas de seguridad ni provisiones. Las rutas comenzaban en el aeropuerto de Beirut y pasaban por Egipto, Libia, Túnez y finalmente llegaban a Orán, en Argelia.
Una vez en España, los migrantes eran trasladados en automóvil a pisos y hostales en Madrid y Toledo, donde permanecían ocultos en condiciones deplorables antes de ser enviados a otros destinos en Europa, principalmente Alemania.
Los miembros de la red utilizaban identidades falsas para evadir a la policía, llegando el líder a emplear hasta siete identidades diferentes. Tras la operación, el líder y otros dos integrantes han sido detenidos en Toledo y enfrentan cargos por pertenencia a grupo criminal, favorecimiento de la inmigración ilegal, falsificación de documentos y contra la seguridad vial.
Además de las detenciones, se han realizado registros en domicilios y establecimientos, donde se han encontrado armas simuladas, armas blancas, dispositivos móviles, joyas, documentos de identidad falsos y otros elementos relacionados con la investigación.
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