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Quique Llopis lucha por el podio en los 110 metros vallas del Mundial, pero se queda vacío.

Quique Llopis lucha por el podio en los 110 metros vallas del Mundial, pero se queda vacío.

El 16 de septiembre en Madrid fue testigo de otra destacada actuación del atleta español Quique Llopis, quien se quedó a las puertas del podio al finalizar cuarto en la final de 110 metros vallas de los Mundiales de Atletismo al Aire Libre en Tokio. Una jornada en la que también se destacó la participación de Marta Pérez, que finalizó novena en la prueba de 1.500 metros, mientras que Mohamed Attaoui y David Barroso lograron clasificar a las semifinales de los 800 metros.

Llopis, originario de Valencia, mostró su potencial nuevamente tras un año donde había rozado la medalla en los Juegos Olímpicos de París, donde también ocupó la cuarta posición. Su rendimiento en la actual temporada ha dejado claro que es un competidor en ascenso, especialmente con sus notables actuaciones en la Liga Diamante.

A pesar de sus esfuerzos, la clasificación de Llopis a la final fue intensa, marcando un tiempo de 13.29 que le permitió superar a su rival japonés Shusei Nomoto por una milésima. El camino hacia la final no fue fácil, pero asegurarse un lugar entre los mejores fue un notable logro en sí mismo.

En la gran final, el campeón europeo se enfrentó a una dura competencia, comenzando con un arranque algo titubeante. Sin embargo, logró posicionarse entre los favoritos a medida que avanzaba la carrera. El estadounidense Cordell Tinch, favorito indiscutible, se llevó el oro con un tiempo de 12.99 segundos, mientras que Llopis luchó intensamente para conseguir un cuarto lugar con un registro de 13.16, quedando detrás de los jamaicanos Orlando Bennet y Tyler Mason.

Tras la carrera, Llopis compartió su experiencia: “He sentido que he estado luchando, a diferencia de hace un año. Esta vez sentí que estaba en la lucha real por las medallas, y aunque no obtuve el resultado deseado, estoy satisfecho por mi actuación". Reconoció que sus competidores también lograron sus mejores marcas personales y destacó la dificultad inherente al atletismo.

En otro ámbito, Marta Pérez navegó emociones encontradas al finalizar novena en la final de 1.500 metros. Aunque su tiempo de 3:58.54 la colocó como la española más rápida en un Mundial, aspiraba a un mejor resultado en una carrera donde deslumbró la plusmarquista mundial keniata Faith Kipyegon, quien conquistó su cuarto título mundial consecutivo.

Pérez, a pesar de sus expectativas, reflexionó sobre la fortaleza de sus competidoras: “Siempre supe que Kipyegon apretaría fuerte en los últimos metros. A pesar de mi buen estado físico, no logré alcanzar un puesto más alto, y eso se debe a que ocho chicas corrieron mejor que yo”.

Las noticias positivas para la delegación española llegaron de la mano de los ochocentistas. Mohamed Attaoui se mostró convincente al ganar su serie con un tiempo de 1:45.23, mientras que David Barroso, con una destacada actuación, logró un 1:44.94 que le garantizó su lugar en las semifinales. Desafortunadamente, Mariano García no logró avanzar, terminando cuarto en su serie.

Attaoui se sintió confiado en su desempeño, planteando la carrera con una estrategia adecuada y manteniendo la calma a pesar de los nervios. “Estaba consciente de la presión, pero sabía cómo manejarla y ejecuté bien mi estrategia”, comentó.

Por su parte, Barroso expresó su satisfacción por haber competido con éxito y ejecutar su táctica con precisión. “Me sentí espectacular y creo que manejé bien la presión de representar a España", agregó.

Finalmente, no todo fue positivo para los representantes españoles en Tokio, ya que Paula Sevilla, quien competía en los 400 metros, no logró pasar a la final, terminando séptima con un tiempo de 50.97, aunque logrando su quinta mejor marca personal.

Durante la jornada, otros atletas también brillaron en el Estadio Olímpico de Tokio, destacando el neozelandés Hamish Kerr, campeón olímpico, quien se impuso en salto de altura, y el canadiense Ethan Katzberg, campeón de martillo, que defendió su título con un sólido lanzamiento de 84.70 metros.